Unas pocas semanas ocupadas por delante», equipacion atletico de madrid 2020 bromea Burgess en su mensaje en la popular red social. El delantero francés celebró su tanto levantando la camiseta rojiblanca para mostrar un mensaje en una camiseta interior en la que se leía: «Feliz cumpleaños, gordi». Los goles cierran todas las heridas y al francés no se le ha podido olvidar cómo hacerlos. Se da la casualidad, en este sentido, que en el actual organigrama del club se mantienen algunas de las piezas claves de estas tres etapas. 19:10 El colegiado castellano-manchego, Alberola Rojas, es el encargado de arbitrar este Osasuna-Leganés de la jornada 32 de LaLiga. Seguidamente pasó al Villarreal y finalmente ha acabado traspasado al River Plate por unos tres millones de euros. El central argentino recaló en el club rojiblanco a coste cero, ya que tenía la carta de libertad tras desvincularse del Málaga y antes de que comenzase la temporada lo fichó el Manchester City por cinco millones de euros.
No será una empresa sencilla pese al empate sellado con 10 hombres en la ida, camiseta atletico de madrid pero la magia aparece en el bando rojiblanco cuando se otea la posibilidad de levantar un título en el continente. Simeone afirmaba tras el heroico empate en el Emirates Stadium que si por algo destacaban sus jugadores era por su capacidad para sobrevivir. Con el balón perdiéndose por línea de fondo, la angustia acabó para los dos, equipacion atletico de madrid dando paso a la decepción por un empate que puede saber a poco a ambos. Los dos, Kroos y el suramericano, controlaron el ritmo del partido. De una importancia mayor la ausencia del brasileño Marcelo, por una sanción evitable por una cartulina a segundos de acabar el partido de ida, que le resta un arma ofensiva y el factor sorpresa. Primer gol del partido! Hizo la pretemporada, pero salió del equipo casi inmediatamente Pasó por Espanyol y Albacete antes de quedar libre y firmar por el Murcia. Es evidente que El Niño no ha tenido continuidad, pero también lo es que cuatro meses sin marcar se antojan demasiados para un equipo que quiere pelear al menos el tercer puesto.