Para llegar al field los equipos tomaban el tranvía eléctrico hasta la esquina de la calle Boyacá donde el cartel del almacén los orientaría, era usual que uno o más integrantes del equipo local los esperasen en un sitio a convenir a fin de llevarlos hasta el field caminando las diez cuadras que los separaban de la parada del tranvía. Personalmente tenía una oferta de en torno a los 400 millones de euros, camisetas atletico de madrid pero también tenía siempre claro que nunca he tenido en mi cabeza salirme hasta consolidar un proyecto.